Un equipo de arqueólogos de la Universidad de Tucumán, el CONICET y especialistas franceses descubrió en Catamarca restos y artefactos con una antigüedad de entre 30.000 y 40.000 años. Los estudios preliminares sugieren que este hallazgo podría modificar de manera radical la teoría del poblamiento de América, hasta ahora situada entre los 13.000 y 15.000 años.
La excavación se realizó en Cueva Cacao, en Antofagasta de la Sierra, un sitio arqueológico donde ya se habían encontrado vestigios de los primeros pueblos andinos. Sin embargo, los nuevos materiales —entre ellos costillas de megafauna, herramientas líticas y fibras vegetales— superan todo registro anterior en la región.
“El descubrimiento puede dar vuelta el mapa arqueológico del continente”, destacó Cristian Mellán, director de Arqueología de Catamarca. “Estamos hablando de ocupaciones humanas muchísimo más antiguas de lo que se creía posible”.
Hasta ahora, la teoría más aceptada sostenía que los primeros Homo sapiens llegaron a América desde Asia cruzando el estrecho de Bering hace unos 15.000 años. Pero los restos hallados en Catamarca duplican esa antigüedad y sugieren que los seres humanos pudieron haber llegado al sur del continente mucho antes, tal vez por rutas alternativas o migraciones previas.
Además, los investigadores encontraron pinturas rupestres con figuras humanas y animales, cerámicas, cabello humano y objetos rituales que demuestran una ocupación continua de la cueva durante milenios. Los análisis de ADN y carbono 14 determinarán si estos restos pertenecen a los primeros grupos humanos que poblaron el continente.
La similitud entre los hallazgos catamarqueños y restos arqueológicos encontrados en China también abre nuevas hipótesis sobre los contactos culturales prehistóricos y la expansión temprana del Homo sapiens.
Si los estudios confirman las dataciones iniciales, el yacimiento de Cueva Cacao se convertiría en el registro humano más antiguo de Sudamérica y uno de los más relevantes del mundo. El hallazgo obligaría a revisar los modelos migratorios, los orígenes de las culturas precolombinas y la cronología de la ocupación del continente.
La misión, respaldada por el Consejo Federal de Inversiones, la Universidad Nacional de Catamarca y la Embajada de Francia, continuará hasta fin de mes. Los resultados podrían redefinir lo que hasta hoy se sabía sobre el inicio de la historia humana en América.