La mayoría de los incumplimientos ocurrieron por no portar el Permiso Temporal Individual de Desplazamiento General.
Debido al aumento de consumo de pescado y mariscos en Semana Santa y dada la contingencia mundial de COVID-19, la Seremi de Salud de Tarapacá cursó más de 200 sanitarios durante el fin de semana largo.
La Unidad de Fiscalizaciones por Coronavirus en la región, reportó dos mil 792 fiscalizaciones, de las cuales 188 derivaron en sumarios por incumplimientos a la normativa sanitaria vigente y también por no portar el permiso general de desplazamiento.
En tanto, la Unidad de Control de Alimentos de la entidad efectuó 134 fiscalizaciones, lo que arrojó 11 prohibiciones de funcionamiento, con 13 sumarios sanitarios y un decomiso de 30 kilos correspondientes a ceviches y peroles, totalizando 201 sumarios.
«Junto al Gobierno Regional, el esfuerzo de los fiscalizadores se concentró fundamentalmente en controlar el cumplimiento de lo que es la cuarentena y las instalaciones de venta de pescados y mariscos para revisar las deficiencias de tipo estructural y de procedimientos, además de analizar que los productos estuvieran libres de riesgo de provocar enfermedades gastrointestinales», explicó el seremi de Salud de Tarapacá, Manuel Fernández.
