Dueño de un talento exorbitante, que lo impulsó a protagonizar clásicos del cine, de la televisión y el teatro. Incluso, con esa capacidad pasmosa en su mochila supo conquistar el exterior. A pesar del éxito, de los reconocimientos, Miguel Ángel Solá vive un calvario.
El prestigioso actor acaba de iluminar un aspecto de su vida privada que no se conocía y que refiere a los problemas que surgieron en su camino por sus divorcios, que lo sumieron en golpes durísimos en lo emocional y principalmente en su faceta económica.
Tal grado de adversidades, que el propio Miguel Ángel soltó una frase devastadora, que nadie avizoraba por la cantidad de trabajos de índole majestuosa y de gran envergadura. “Tengo que trabajar hasta que me muera para ganarme el sustento”, reveló en una entrevista con Karim González.
Envuelto en la sinceridad, Solá identificó el punto más delicado, el momento en que todo se convirtió en cuesta arriba en lo financiero y sostuvo: “El primer matrimonio me dejó sin nada, absolutamente nada”. Incluso se animó a calificar a Blanca Oteyza: “Es una mala persona, no digo que lo sea, yo la considero una mala persona. Me causó mucho daño innecesario”.
Y asimismo explicó lo que padecieron sus dos hijas en común, María Luz y Cayetana: “Me vieron disminuido en toda mi posición, anímica, mental y económica”. Asimismo, el actor se refirió a su segunda separación, la que experimentó con Paula Cancio, la mamá de su heredera más pequeña.
MIGUEL ÁNGEL SOLÁ CONTÓ QUE ESTÁ EN BANCARROTA POR SUS DIVORCIOS
“Le adeudo bastante porque no pude darle ni a ella ni a mi hija lo mismo que pude proveer a mis otras hijas”, expresó con enorme valentía. En tanto que reconoció que esta última ruptura lo sumergió en un viaje doloroso :“Pasé un momento bravo, bravo, bravo. Tuve un año con una depre grande, lloraba todo”.
