La ministra de la Presidencia, Marianela Prada, es uno de los rostros visibles del Gobierno de Bolivia. Ante la ausencia de un vocero presidencial, su figura ha cobrado mayor representatividad frente a los medios de comunicación.
Este miércoles conversó con Infobae sobre la denuncia que hizo el Gobierno ante la comunidad internacional respecto al supuesto intento de Evo Morales de acortar el mandato del presidente Luis Arce. Como esta cuestión es parte de la interna del partido, se refirió a la disputa entre ambos liderazgos y reflexionó sobre los errores que cometió el Movimiento Al Socialismo (MAS), entre otros temas.
¿En qué consiste la denuncia que hizo el Gobierno de Bolivia ante la comunidad internacional en relación a advertencias del expresidente Evo Morales?
Este martes tuve una con el cuerpo diplomático sobre una marcha que nosotros claramente identificamos como política y con el objetivo claro de (habilitar) la candidatura del expresidente Evo Morales. La denuncia era en relación a unas amenazas de que el presidente tenía que cambiar a sus ministros para seguir gobernando y le daba un plazo de 24 horas para hacerlo, y también en relación a un bloqueo nacional de caminos. Hicimos la denuncia sobre ambas cosas, que (Evo Morales) está dispuesto a acortar el mandato del presidente con la intención de volver a poder y generar escenarios de convulsión en nuestro país con un objetivo político personal.
– En varias apariciones públicas, funcionarios del Gobierno han manifestado que van a aplicar “el mandato de la Constitución Política del Estado” en caso de bloqueos. ¿A qué se refieren en concreto? ¿Los van a intervenir?
– En un anterior bloqueo de Evo Morales, llegamos con comisiones para hablar e intentar convencer a la gente de que ese no es el camino. El derecho a la protesta está garantizado pero el derecho a la protesta no puede significar la vulneración de derechos del resto de la población. Hablamos y logramos suspender muchos puntos bloqueos de esa forma. En otros en los que tiraban piedras desde los cerros a la gente, o cuando se tornaron situaciones de violencia, estamos llamados en el marco de la constitución a intervenir y desbloquear esos caminos.
– Si hay bloqueos a partir del 30 de septiembre como han anunciado voceros del evismo, ¿usted quiere decir que van a intentar desanimar a la gente primero y que si hay violencia los van a reprimir?
– Hasta ahora lo que hemos hecho es llamar al diálogo y lo seguiremos haciendo. Estamos hablando con el Defensor del Pueblo sobre la posibilidad de abrir un espacio de diálogo para evitar que se llegue al bloqueo. Vamos a agotar los intentos de diálogo y luego iremos viendo como se desarrollan las medidas y amenazas que han indicado, para luego proceder a las acciones correspondientes.
– El presidente Luis Arce criticó que Evo Morales quiera imponer su candidatura “a la mala” y vulnerar la constitución para lograr su reelección. Es llamativo porque en 2013 y 2019 alentó su candidatura pese a que eran inconstitucionales porque ya se habían cumplido sus dos mandatos consecutivos. ¿A qué se debe esta contradicción?
– No sé si es una contradicción. Voy a hablar de mi experiencia, creo que cometimos un error y todos dentro del MAS deberíamos haber aprendido. Yo hice campaña por la reelección (de Evo Morales) y de manera autocrítica he sacado muchas lecciones, algunas muy dolorosas, como darme cuenta de que a cualquier líder le hace un tremendo mal esta suerte de culto a la personalidad, de crear semi dioses en la tierra, al punto que Evo Morales se cree el salvador de Bolivia y no se ve desde otro espacio que no sea la silla presidencial. Se hace absolutamente necesario hacer autocrítica para ajustar la democracia interna, que lamentablemente ha sido muy débil. Evo Morales no ha aprendido de los errores.
– Ese aprendizaje sobre democracia interna que menciona, ¿no los llevaría a realizar primarias competitivas dentro del partido para poner fin a la disputa entre ambos líderes por la vía institucional?
– Comparto el hecho de que haya democracia interna y elecciones primarias, pero no la pantomima que hubo la anterior vez. Fueron unas primarias de aparente democracia donde las cosas ya estaban definidas, ya se sabía quiénes iban a ser los candidatos y había un binomio por partido. Si nos sinceramos, no puede llamarse primarias si la militancia no puede ni siquiera elegir. Unas primarias plenas tienen que ver con la militancia y la forma en la que se eligen a los candidatos, lamentablemente en las primarias un candidato moviliza a su facción y el otro candidato no está en las mismas condiciones. Entonces el partido termina definiendo por uno que posiblemente no tenga las mejores condiciones para ganar la elección.
– Ministra, hay gente que cree que el Gobierno se ocupa mucho de estos desacuerdos políticos y que desatiende otros más importantes como la gestión de la crisis económica o los incendios. Muchas personas ven una falta de sintonía entre los intereses reales de la gente y las prioridades del Gobierno. ¿Que le dice usted a estas personas? ¿Por qué tendría que ser importante el embrollo interno del MAS?
– Porque lamentablemente ha sobrepasado los propios límites de lo que es una organización política y las acciones de Evo Morales están orientadas a perjudicar a toda la población, entonces deja de ser algo netamente interno. Cuando todavía teníamos encuentros con Evo Morales, le decíamos “hablemos de estos temas aquí, los resolvamos aquí, no los traslademos a la población”. Incluso se hizo un acuerdo pero Evo lo incumplió y a los pocos meses ya habían proclamaciones de Evo presidente 2025. Todos hemos sido arrastrados a esa coyuntura, la agenda es política, vivimos como si estuviéramos a un mes de las elecciones. Por supuesto que los otros temas son de interés de gran parte de la población, a la que no le interesa lo que está pasando en el MAS. Hay una responsabilidad conjunta (con los medios de comunicación) para abrir una vávula de oxigenación a la agenda politizada, porque la población quiere saber qué estamos haciendo en relación a los incendios y al tema económico.