Una proyección poblacional realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) señala que, para 2020, la ciudad de Potosí ya tenía más de 220 mil habitantes, aunque dirigentes vecinales creen que se tiene más de 300 mil en la actualidad.
Para esa cantidad de habitantes hay cerca de 70 mil motorizados entre los particulares, oficiales y de empresas, que circulan por las calles de la Villa Imperial y requieren una gran cantidad de diésel y gasolina.
El reporte oficial del gerente comercial de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, Gilmar Cruz, establece que, a través de las diferentes estaciones de servicio instaladas en la ciudad de Potosí, cada día se comercializa 260 mil litros de gasolina, lo que equivale a un volumen que sería cargado por 8 cisternas.
En lo que concierne al diésel se da cuenta que la población de la ciudad de Potosí consume 290 mil litros que equivalen a lo que transportan nueve cisternas.
Entre la gasolina y el diésel en la ciudad de Potosí existe una comercialización de 550 mil litros de carburantes cada día.
En el último tiempo se están formando largas filas para la compra de carburantes y, de acuerdo a los técnicos de YPFB, se debe a un desajuste en la entrega de diésel, pero en lo que concierne a la gasolina se cuenta con la suficiente cantidad del producto y la venta es del todo regular.
Los entrevistados indican que un fenómeno se está produciendo en el último tiempo: la gente quiere adquirir mayor cantidad de carburantes por lo que realizan la compra en tanque lleno, lo que sube la demanda, ya sea de la gasolina o el diésel.