Del altiplano a la cima del mundo: la extraordinaria aventura de cuatro cholitas de Bolivia

Son cuatro mujeres indígenas de la comunidad Aymara.

Son reconocidas en su país por haber escalado varias montañas de Sudamérica con sus vestidos típicos.

Ahora, enfrentan la aventura de llegar a hacer cima en la montaña más alta del mundo.

«Cuando estás tan arriba, como tocando el cielo, te sentís libre. Así fue que pensamos: vamos a seguir escalando». Toda una definición de un modelo de vida. Así se expresa Cecilia Lusco, una de las cuatro mujeres aymaras que se dedican al montañismo. Son conocidas como las «cholitas escaladoras» y luego de conquistar las montañas más altas de Sudamérica, tienen un nuevo desafío: llegar al techo del mundo, a la cima del Himalaya.

 

Las «cholitas escaladoras»

Sus aventuras comenzaron hace casi 10 años y casi por casualidad. Su padre era andinista y uno de los primeros guías de «trekking» en Bolivia. Desde niña se apasionó con ese tipo de aventuras. Así fue que años más tarde conoció a Eloy, otro andinista, quien se convertiría en su esposo. Él fue el que le propuso ser cocinera de montaña para los escaladores. Así comenzó la posibilidad de concretar los sueños que guardaba desde niña.

En 2015, diez «cholitas escaladoras» llegaron a la cima del Huayna Potosí, a 6.088 metros de altura. Fue un hito. Celebrado en toda Bolivia, pero solo marcó el comienzo. Luego vinieron otras proezas como subir al Aotango, al Illimani, al Pomerage y al Sajama a 6540 metros sobre el nivel del mar. Las » cholitas escaladoras» pasaron a ser una cuestión de orgullo para la comunidad Aymara y para Bolivia.

 

La siguiente aventura las consagró internacionalmente y las llevó al cine.

Las «cholitas escaladoras en el Aconcagua»

«Nunca pensé en dar entrevistas, solo en escalar montañas» reconoce Cecilia. En 2018 su aventura en la montaña más alta de América, el Aconcagua, fue filmada especialmente y llegó al cine con gran repercusión.

El registro de su hazaña les hizo ganar el premio principal en el festival de cine de montaña «Banff». Eso las llevó al desafío mayor: llegar al techo del mundo, el Himalaya.

 

Escaladoras con sus trajes de Cholitas

Utilizan la ropa típica de las mujeres aymaras: sus pañuelos o sombreros, ponchos, capas y polleras. Por supuesto, debajo de la indumentaria característica están preparadas para soportar las inclemencias del tiempo, nevadas y bajas temperaturas. Hasta adaptaron sus bolsas para transportar los equipos de escaladoras sin necesidad de recurrir a mochilas.

Así se embarcaron en un sueño que marcaron hace varios años: este 2024 están determinadas a hacer cumbre en el Himalaya a 8.800 metros de altura.

Lidia Huayllas fue la que lanzó el desafío a sus compañeras. «Las mujeres aymaras usamos polleras, mantas, sombrero, joyas y un buen porte al caminar», apunta Lidia, y agrega: «Eso mismo quisimos llevar a la cima del mundo, por supuesto, muy bien protegidas del clima».

Cecilia, Julia, Elena y Alicia están ya listas para la máxima aventura de sus vidas. No irán solas ya que tendrán la fundamental compañia de sherpas nepalíes, los guías que las llevarán por el mejor camino a la cima del Everest.

Su objetivo es llevar las faldas aymaras y la bandera de Bolivia para que se luzcan en el techo del mundo. Un verdadero mensaje de univarsalidad.