El índice de desaprobación del presidente de Chile, Gabriel Boric, aumentó a finales de febrero según dos nuevas encuestas, lo que pone en muestra los desafíos que enfrenta su administración mientras prepara otro impulso de sus reformas clave con las que se hizo elegir en su momento en 2021, pero que con el tiempo han perdido el apoyo popular y lo han hundido en la impopularidad de la sociedad chilena.
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Aproximadamente el 66% de los votantes rechaza la gestión presidencial de Boric, la mayor cantidad desde septiembre y frente al 61% de la semana anterior, esto según una encuesta de la firma Cadem publicada este domingo, dando muestra de la gran crisis que vive el mandatario de izquierda desde casi que llegó al poder, sin tener básicamente la llamada ‘luna de miel’ política.
Una encuesta publicada el mismo día por Pulso Ciudadano sitúa su desaprobación en un 62,2%, la peor desde diciembre del 2022. Con esto, demuestra que el presidente de izquierda pasa por un momento muy bajo de su gestión, todo esto mientras su administración se prepara para nuevas negociaciones con los legisladores sobre propuestas para aumentar las pensiones y aumentar los ingresos fiscales.
Aunque el presidente de Chile, Gabriel Boric, ofreció su país como escenario de negociación, Petro invitó a Cuba a que sea la sede de este proceso.
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Gabriel Boric se ha visto estancado por el aumento en el país austral del crimen, la migración clandestina y un par de escándalos de corrupción que han sacudido al país. Para complicar aún más las cosas para el gobernante de izquierda, su gobierno tiene un espacio muy corto para poder reunir apoyo y lograr aprobar leyes antes de que las elecciones locales de octubre dominen la agenda política. Mientras tanto, se pronostica que la derecha podría tener un gran triunfo de dichos comicios.
En enero, la cámara baja del Congreso aprobó el texto base de la reforma de las pensiones y al mismo tiempo rechazó varios artículos clave, preparando el escenario para un pesado debate en el senado chileno en marzo, donde la administración de Boric buscará las herramientas y apoyos necesarios para poder lograr aprobar estas medidas, las cuales fueron dos de sus banderas principales durante la campaña presidencial.
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El gobierno también busca respaldo para medidas que incluyen un plan antievasión para aumentar los ingresos fiscales y poder financiar las reformas progresistas que tiene en su agenda para los chilenos. Si bien Boric está luchando por obtener apoyo a dos años de su mandato, sus niveles de desaprobación son más bajos que los del expresidente Sebastián Piñera en el mismo momento durante su segunda administración, según Cadem.
Son más o menos los mismos que los de Michelle Bachelet justo antes de la mitad de su segundo mandato. La encuesta Cadem encuestó a 704 personas entre el 28 de febrero y el 1 de marzo y tiene un margen de error de más o menos 3,7 puntos porcentuales. Pero en contraste, el mandatario cayó en su imagen a pocas semanas de su posesión, sumergiéndose en números negativos sin poder recuperarse a semanas de cumplir dos años en el poder.
Pulso Ciudadano encuestó a 1.213 personas entre el 28 y 29 de febrero y tiene un margen de error de más o menos 2,8 puntos porcentuales. Además, para buena parte de la ciudadanía, se ve difícil que Boric pueda levantar su popularidad en los próximos meses, mientras que líderes de derecha se consolidan más en la imagen pública.
