A pocos meses de haber confirmado su romance, Marcelo Tinelli y Milett Figueroa habrían dado un paso importante en su relación. Las alarmas se encendieron cuando el conductor compartió en sus redes sociales una romántica foto indicaría su compromiso con la modelo peruana.
A través de sus historias de Instagram, el presentador subió una imagen de su mano entrelazada con la de su novia, donde se puede observar que ella tiene un importante anillo brillante en el dedo anular. Como descripción, Tinelli solo uso dos emojis de corazón y arrobó a su novia. Y como ninguno se proclamó antes ni después al respecto, la imagen sembró dudas y especulaciones entre sus seguidores.
El objeto en sí, que porta en su dedo, es una novedad para la modelo. En sus antiguas fotos, que posteó en noviembre y en diciembre, no tiene el anillo. Tampoco lo lució durante su paso por el Bailando, lo que hace suponer que es un regalo que el conductor le hizo en las últimas horas.
Para evitar las especulaciones, Teleshow se comunicó con una persona del círculo íntimo de conductor, que aseguró que efectivamente se trata de un obsequio que Marcelo le hizo a Milett al regresar de su viaje a Mendoza donde registró escenas del reality familiar. Pero de momento no hay compromiso formal, apenas una prueba de un amor que es cada vez más fuerte.
La pareja, que se conoció en el marco del certamen de baile, no tardó mucho en blanquear su amor y mostrarse juntos, ya sea frente a cámara en el programa de América como en su intimidad, en comidas y eventos familiares como cumpleaños, las fiestas de fin de año y las vacaciones en Punta del Este. La peruana, incluso, participa como agente secundario de las grabaciones del reality que sigue la vida familiar de Marcelo y sus hijos Candelaria, Micaela, Francisco y Lorenzo.
Durante una de las galas en las que participó la influencer, el conductor bromeó con la posibilidad de formalizar la relación: “Ya estamos para casarnos nosotros. Hay que ver la fiesta donde la hizo Caro, porque nos puede dar datos”, dijo en relación a la boda de Pampita y agregó: “A mí me encantó la propuesta que te hicieron afuera, una cosa así tengo que hacer yo”.
Entonces le preguntó a Milett si ella tendría ganas de casarse en algún momento, a lo que le respondió: “Nunca lo he pensado así, pero cuando llega el amor y las dos personas son románticas como nosotros, nacen cosas lindas que nunca has pensado, y el casamiento y todo eso, es una sensación que bueno… a mí me nace casarme con el amor de mi vida”.
Confeso amante de casarse y tener hijos, el conductor no le teme a seguir agrandando la familia y cada vez que puede expresa su deseo de volver a ser padre. Con un historial de grandes amores, se casó en dos oportunidades y convivió otras tantas.
Con Soledad Aquino, una productora del programa Badía & Compañía se conocieron haciendo ese programa y el flechazo fue inmediato. Se casaron en mayo de 1986 y tuvieron dos hijas: Micaela y Candelaria. Se separaron en 1993. A esa altura, la fama del conductor crecía a pasos agigantados.
Un año después de la ruptura, Paula Robles entró oficialmente en la vida del conductor. La bailarina integraba el staff de Ritmo de la noche como una de las históricas T-Nelly’s. Tres años después dieron el sí en Macondo, la estancia que el conductor tenía en Baradero, al norte de la provincia de Buenos Aires. Fue el 1º de noviembre de 1997 y ella esperaba su primer hijo, Francisco. Luego vendría Juana, hasta que se separaron en 2009.
Después de varias relaciones, algunas blanqueadas y otras no, llegó Guillermina Valdés a su vida. La primera foto juntos apareció durante la primera semana de agosto de 2012 y pronto se confirmó. No se casaron y tuvieron una poco convencional convivencia en departamentos separados por un par de pisos, en la misma torre de Palermo. Juntos ensamblaron sus familias con los hijos de la actriz, Dante, Paloma y Helena, y tuvieron a Lorenzo, el quinto hijo del conductor. La relación duró ocho años.