Realizaron megaoperativo para recuperar el control de la cárcel más grande de Paraguay, tomada por el clan Rotela

Un policía fue asesinado con un hachazo en la cabeza y al menos cinco presos murieron en el operativo.

Las autoridades trasladaron a cientos de reclsos a otras penitenciarías y hallaron varias armas en el penal

El operativo policial y militar busca retomar el control del centro penitenciario

La Policía Nacional y las Fuerzas Armadas de Paraguay llevaron a cabo este lunes un megaoperativo con el objetivo de recuperar el control de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, la más grande del país, que estaba tomada por el destacado grupo criminal clan Rotela, liderado por Armando Javier Rotela.

Desde las 5 de la mañana, un total de 1.100 agentes de Policía y otros 1.218 miembros de las Fuerzas Armadas participaron en el operativo, en el que murió al menos un agente y al menos cinco presos. El oficial fallecido se trata de un miembro de Policía, que murió tras recibir un machetazo en la cabeza.

“El objetivo es la erradicación de los privilegios y potestades de las bandas criminales en la operación de este penal, una mejor distribución de internos y la presencia institucional y efectiva del Estado en un territorio parcialmente secuestrado por la criminalidad desde hace años”, explicó el Ministerio de Justicia.

El Ministerio del Interior dijo que los presos serán trasladados a espacios que garanticen su seguridad

A media mañana, ya se apreciaban los primeros resultados. Decenas de presos eran ubicados en filas, semidesnudos y con pintura naranja en sus cuerpos, a la espera de su traslado a otras penitenciarías.

Mientras tanto, algunas mujeres que habían pasado la noche en el penal sin estar presas pedían piedad y aseguraron en videos que en el lugar había niños y embarazadas. El clan manejaba el penal, por lo que se vieron sorprendidas ante el operativo y buscaron refugiarse en habitaciones privadas.

Pero el principal blanco era Rotela, quien estaba refugiado en el Pabellón D del penal, en una zona conocida como “La Jungla”, donde los reos estaban fuertemente armados. Se trata de un criminal conocido como el zar del microtráfico, y está cumpliendo una pena de 19 años, más 8 años de medidas de seguridad por posesión y tráfico de drogas.

Pese a contar con custodia interna, poco a poco los “guardias” del clan comenzaron a rendirse luego de varios minutos de fuego cruzado, blandiendo toallas y camisetas. Rotela, comprometido, trataba de negociar su rendición, reportó ABC Color. En ese lapso, también trató de usar a una embarazada como rehén, según detalló el comisario Nimio Cardozo.

Sus intentos no prosperaron y, al verse acorralado, se entregó.

“Será trasladado a una cárcel de máxima seguridad. Rotela se escondió utilizando como escudo a una mujer embarazada, el profesionalismo del grupo táctico hizo que puedan reducirlo y capturarlo”, destacó Rodrigo Nicora, viceministro de Política Criminal. “Tenían armas de fuego, combustible, explosivos. La mujer no sufrió ningún tipo de lesión. El Estado paraguayo respetó los derechos humanos y no negociará con criminales”, añadió en una entrevista con el programa “Arriba Hoy”.