La campaña opositora está planchada y hay ruido interno en JxC

Alarma en la dirigencia de Cambiemos a 20 días de las elecciones. "Es como si hubieran tirado la toalla", dicen por lo bajo.

Las elecciones provinciales se realizarán en Tucumán el próximo 11 de junio pero, a 19 días de ir a las urnas, la campaña de Juntos por el Cambio(JxC) pareciera estar en piloto automático y sin coordinación, lo que comienza a generar ruidos en el espacio que impulsa para la gobernación a la fórmula integrada por el radical Roberto Sánchez y el larretista Germán Alfaro, intendente de San Miguel de Tucumán. «Se está dependiendo casi al extremo de instrucciones de Buenos Aires y eso genera incertidumbre en la dirigencia y en la militancia, porque no hay espacios para unificar criterios de acción», reconoció un referente de peso de la coalición opositora.

«La campaña está planchada, nadie sabe cómo sigue. Entonces cada uno hace lo que puede con los escasos recursos que tiene. Además, casi no se ve juntos a Sánchez y Alfaro», se quejó también un candidato a legislador por la Sección Electoral Oeste, una de las más bravas para pescar votos. De acuerdo al primero, desde que la Corte Suprema de Justicia suspendió las elecciones y una semana más tarde el gobernador Juan Manzur declinó su candidatura a vice en favor del ministro del Interior, Miguel Acevedo, no hubo ni una reunión de la mesa provincial para analizar el escenario y marcar un rumbo.

En la oposición destacan que las únicas oportunidades en las que estuvieron casi todas las figuras alrededor de una mesa fueron con las visitas del gobernador de Jujuy y presidente de la UCR, Gerardo Morales, el 10 de mayo, al día siguiente de la suspensión de las elecciones; y la semana pasada con la llegada del ex senador Miguel Ángel Pichetto, referente de Peronismo Republicano. «En ambas situaciones, se estuvo para las fotos, pero no se discutió nada. Fueron oportunidades perdidas, no se pueden cometer esos errores, es de una ingenuidad de alto riesgo», reflexionó el primer dirigente consultado, de extracción radical. Los dos encuentros se produjeron en hoteles de San Miguel de Tucumán.

Ambos referentes admiten que es imposible hacer una campaña similar a la del oficialismo, que a diario realiza actos importantes de manera simultánea en el interior y en la capital tucumana. Sin embargo, la decisión opositora de organizar acciones proselitistas de «baja intensidad» corre el riesgo de leerse en las filas propias como un gesto de resignación y de haber «tirado la toalla» en la pelea provincial, con el riesgo de que cada sector se concentre en su pago chico. «Quedan poco más de dos semanas y serán claves todos los días, ojalá que esto se corrija», sostuvo el ex legislador provincial.