El Tren de Aragua en Chile: la banda en Chile que quiere convertir Iquique en Ciudad Juárez

La organización narcotraficante está radicada muy cerca de la frontera con Bolivia. La coordinación entre las diferentes fuerzas policiales y jurídicas del país

Delincuencia, sangre, homicidios e investigación criminal es lo que ha dejado el Tren de Aragua en Chile desde su ascenso meteórico en el país. No hay dudas que para las autoridades nacionales este año ha sido complejo pues la megabanda con lazos en varios países latinoamericanos se ha instalado en parte del territorio, y ha exigido nuevas formas de trabajar y una coordinación inédita entre el gobierno chileno, policías y la fiscalía para desarticular a sus integrantes.

Y es que el Tren de Aragua es un verdadero problema en Chile. Según InsightCrime, la banda y el narcotráfico serían los responsables del empeoramiento de vida en algunas partes del país, como por ejemplo, en la macrozona norte, distorsionando el vivir en la ciudad de Iquique, situada a 1.757 kilómetros de Santiago, y que colinda muy cerca de la frontera boliviana. Aquí, el fiscal regional de Tarapacá, Raúl Arancibia, hizo un llamado desesperado a mediados de julio para “evitar que Iquique se convierta en Ciudad Juárez”, debido a la violencia impera en esta localidad. Hasta inicios de agosto se contabilizaban en Iquique 31 homicidios, mientras que el 2021 hubo 51.

El problema no es solamente del norte de Chile pues la ciudad vecina de Iquique, Arica, también sufre por los tentáculos del Tren de Aragua. Lo impactante es que la pesadilla de la megabanda también habría llegado hasta las regiones del centro del país, e incluso, a lugares lejanos como el centro de Chile, graficando así el poder de despliegue criminal de la agrupación.

En el país, el Tren de Aragua ha sido capaz de importar delitos que antes no eran comunes en el país, como por ejemplo, el tráfico de inmigrantes y el sicariato. Además, se ha registrado que manejan la explotación sexual de mujeres y hasta la tortura de sus contrincantes. La violencia extrema es uno de sus mandamientos, y esto ha impactado incluso a policías de basta experiencia.

Sin embargo, ¿cuáles son los orígenes del Tren de Aragua?, ¿cómo fue capaz de llegar a Chile?, ¿y qué se está haciendo para desarticular a sus miembros?

Los primeros pasos del Tren de Aragua se sitúan en Venezuela, específicamente en el estado de Aragua. Alrededor del 2009 y 2010 esta zona era parte del Plan Socialista Nacional de Desarrollo Ferroviario 2006, pero nunca pudo ver la luz. La frustración de los trabajadores devino en delincuencia como extorsión, secuestros, robos y homicidios.

 

No obstante, según el medio La Tercera, la periodista venezolana de investigación Ronna Rísquez no cree en esta versión. Para ella, los orígenes de la banda se situarían en el descontrol en las cárceles de Venezuela, y la aparición de una figura dentro de las cárceles llamada el “pran”, es decir, líderes máximos en movilizar temas económicos de una organización criminal. Para Rísquez, “lo concreto es que había una banda que operaba fuera del Centro Penitenciario de Aragua (conocido como Tocorón) liderada por ‘Chino’ Pedrera. Esto coincide con el nacimiento de los ‘pranes’ y su control de las cárceles. Algunos de los miembros de la banda pasaron por la prisión de Tocorón, donde conectaron con sus líderes, dando inicio al Tren de Aragua”.

El director del Observatorio Venezolano de Violencia, el sociólogo Roberto Briceño-León, agrega el dato de que el 2005 el gobierno de Hugo Chávez cedió “el control interno de las cárceles a los propios presidiarios a través de un acuerdo en el que se eliminaba el control externo y ellos se encargaban de mantener el orden interno de la cárcel y evitar muertes”. No obstante, todo salió mal y nacieron líderes por esta política fallida, entre ellos, Wilmer José Brizuela, conocido como “Wilmito”.

Para Rísquez, el nombre del Tren de Aragua surge el 2014. Su líder sería Héctor Rusthenford Guerrero Flores, más conocido como el “Niño Guerrero” aunque es probable que existan otros cabecillas. Este habría alcanzado notoriedad cuando ordenó, según la prensa local, ajusticiar a “Wilmito” quien había sido trasladado a Aragua, ganando así control total de la cárcel Tocorón.

Se calcula que en la actualidad el Tren de Aragua tiene entre 2.500 y 3.000 miembros activos aunque Rísquez cree que hoy son alrededor de 5.000. Desde el 2013 en adelante el Tren de Aragua inició su expansión a otros estados de Venezuela hasta que este país les quedó chico. Así saltaron a Latinoamérica, y a Chile también.