Salta: rechazaron sobreseer a una médica que practicó un aborto

Por segunda vez, la Justicia no hizo lugar a un amparo presentado por la defensa de la doctora Lucía Miranda Ruiz, quien se desempeñaba en el Hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal. Agrupaciones feministas repudiaron la medida.

El juez de la Sala I del Tribunal de Impugnación de Salta, Luciano Martini, resolvió no hacer lugar al recurso de apelación presentado por la defensa de la médica imputada por realizar una Interrupción Legal del Embarazo (ILE) en el hospital de Tartagal, del norte salteño, informaron fuentes judiciales.

«No se discute el derecho vigente en orden a la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) y a la interrupción legal del embarazo (ILE); tampoco los deberes que, sobre el particular y por mandato legal alcanzan a los profesionales de la salud o, mejor dicho, al servicio estatal de salud», señaló el juez al resolver sobre el recurso.

Así se refirió Martini al recurso de apelación presentado por la defensa técnica de la médica Lucía Miranda Ruiz, que se desempeña en el Hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal, contra la resolución que no hizo lugar al pedido de sobreseimiento.

«Lo que se trae a consideración es si los hechos investigados se adecuan o no al ordenamiento jurídico penal; es decir, ante todo, una cuestión fáctica y de prueba que impone examinar los elementos de convicción agregados a la causa y las medidas que, eventualmente, podrían restar por producirse», dice la resolución judicial.

En este sentido, el magistrado recordó que el sobreseimiento es una decisión «que cierra definitiva e irrevocablemente la causa a favor de quien se dicta, por eso, en principio presupone un estado de convicción asimilable a la certeza absoluta, cualquiera sea la causa que se estime como concurrente para disponerlo».

Del decreto de imputación surge que la médica habría intervenido en el procedimiento de interrupción voluntaria de un embarazo de 22 semanas y dos días, realizado a una joven de 21 años, «sin su consentimiento, ya que previamente habría manifestado su arrepentimiento».

La denuncia contra la profesional fue radicada por una tía de la gestante.