Europa discute un embargo al petróleo y gas de Rusia

La medida sería un golpe demoledor para las arcas del Kremlin, ya que por ese rubro le ingresan unos US$ 50.000 millones anuales. Pero no hay unanimidad en el bloque.

La Unión Europea quiere terminar lo antes posible con su dependencia del gas y el petróleo ruso. Cueste lo que cueste. Tras el corte del suministro del gas la semana pasada a Bulgaria y Polonia decidido por Vladimir Putin, los ministros de Energía de la UE discuten desde este lunes una dura respuesta a Moscú que incluiría un nuevo paquetes de sanciones por la guerra en Ucrania.

Bruselas quiere golpear al Kremlin dónde más le duele: evalúa imponer un embargo al petróleo ruso. El impacto sería dramático para las arcas rusas: las ventas de crudo a Europa le suponen a Moscú unos 50.000 millones de euros anuales, según Eurostat, la oficina europea de estadística. Pero también habría repercusiones en la UE: expertos alertan sobre un escenario de racionamientos a partir del próximo invierno boreal si se impone esa medida.

El Consejo de Ministros de Energía de la UE sesiona en la capital belga de forma extraordinaria. Es la primera reunión del área energética europea después que Rusia cortó su abastecimiento de gas a Polonia y Bulgaria porque esos dos países se negaron a pagar en rublos, como exige Moscú desde el inicio del conflicto bélico en represalia por las sanciones de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN.

”Nos negamos a pagar el gas ruso en rublos y Rusia nos cortó el suministro, pero estamos a salvo”, dijo este lunes la ministra polaca de Energía, Anna Moskwa, al llegar a la reunión en Bruselas.

En respuesta a ese gesto de Rusia “pedimos un embargo inmediato sobre el petróleo y el gas rusos. Ha llegado el momento del petróleo, luego vendrá el gas”, añadió. Para Moskwa, “Europa debe deshacerse de la dependencia de los combustibles fósiles rusos”.

Los ministros de Energía europeos evalúan planes de contingencia, mecanismos de solidaridad comunitaria y fórmulas alternativas de aprovisionamiento de combustible.

Según el diario español El País, entre las medidas discutidas se encuentran un sistema de compra conjunta de combustible copiando el esquema utilizado para la compra de vacunas durante la pandemia o una nueva regulación de almacenamiento de gas propuesta por la Comisión Europea que obligará a llenar las reservas hasta el 80% antes de noviembre próximo.

Un eventual embargo al petróleo ruso sería un duro golpe parea Moscú. Pero no sería gratuito para Europa. El plan podría provocar cortes y racionamiento de combustible en las capitales europeas. Fuentes citadas por el periódico madrileño señalan que esta situación es considerada “más que probable de cara al próximo invierno” boreal.

Pero el proyecto tiene detractores aún dentro de la UE. Hungría, gobernado por el centroderechista Viktor Orbán, muy próximo a Putin, se niega a sumarse a las sanciones energéticas contra Rusia. Hasta ahora Europa solo ha aprobado un embargo contra el carbón ruso.