Cada vez es más frecuente la presencia de personas en situación de calle -tanto nacionales como extranjeros-, quienes pernoctan y realizan sus actividades en el borde costero de la ciudad, aunque también, hay otros que toman rumbos distintos, instalándose en parques y calles céntricas, tal como ocurrió el jueves, cuando algunos individuos montaron sus rucos en el Odeón de la Plaza Colón.
Respecto al aumento de estos asentamientos, el seremi de Desarrollo Social y Familia, Patricio Martínez, comentó que “es evidente que el fenómeno de los migrantes ha provocado la proliferación de rucos en diferentes espacios públicos, que son responsabilidad del municipio”.
Sin embargo, añadió que “hay que hacer una salvedad, ya que muchos de los migrantes están en “condición de calle”, es decir, llegan a la ciudad, viven algunos días acá y luego se van al sur del país, que es diferente a una permanencia estable en espacios públicos”.
En este sentido, Martínez especificó que “respecto a la situación de los calles nacionales, nosotros tenemos una serie de dispositivos de ruta para estas personas, además del albergue San José. Sin duda, la gran cantidad de migrantes que han llegado a la ciudad hace más notoria la visibilización de este problema”, cerró.
Por otro lado, según el último Registro Social de Hogares Anexo Calle -con datos del 21 de diciembre de 2021-, Antofagasta tiene 332 personas en situación de calle, lo que se traduce en un aumento de 65 individuos en comparación a la cifra de 265 registrada antes de la pandemia.
Rutas
El Hogar de Cristo, es una de las instituciones presentes en la región que va en búsqueda de personas en situación de calle, brindándoles apoyo en distintas áreas, con la entrega de alimentos, abrigos, atención médica y hospedaje (a cerca de 20 migrantes). Por lo mismo, cada domingo, los voluntarios realizan una ruta en los distintos sectores de la comuna.
De acuerdo a Andrea Cox, quien está a cargo de la gestión social territorial del Hogar de Cristo, en esta ruta se pudo realizar un catastro que contabilizó unas 500 personas en calle. No obstante, también aclaró que la población es muy volátil y que por tanto, es difícil ubicar a los individuos.
“Los mismos voluntarios nos han alertado, que son distintas las personas o que se fueron, por lo que tienen que prestar ayudas rápidas, entregando en dos días frazadas o atención médica, por ejemplo”, agregó.
Además, Cox explicó que “como la crisis ha sido constante y se ha perpetuado por tanto tiempo, pareciera que siempre están las mismas personas, porque en los rucos, si no está la misma familia, después es otra y así sucesivamente”. Asimismo, comentó sobre la ruta calle que se realizaba junto a la seremi de Desarrollo Social, la cual valoró enormemente porque atendían hasta 100 individuos diarios.
