El gobierno cerró con China la construcción de Atucha III

En la previa a la visita de Alberto a China se firmó el contrato para construir la cuarta central nuclear argentina con una inversión superior a los 8000 millones de dólares.

En la previa de la vista de Estado de Alberto Fernández a China, la potencia asiática destrabó el que acaso sea al anuncio más importante de la gira: la construcción de la cuarta central nuclear argentina, por un costo que superará los 8.000 millones de dólares. Se trata además de un hito trascendente en el desarrollo nuclear del país, que hace años venía estancado.

La empresa estatal Nucleoeléctrica Argentina junto a la Corporación Nuclear Nacional de China firmaron este martes el convenio que activa la construcción de la central Atucha III. Se trata de un reactor de 1200 MWe que se instalará en el Complejo Nuclear Atucha en la localidad de Lima, provincia de Buenos Aires, lo que motivó que el gobernador Axel Kicillof participara de la teleconferencia.

Además de las autoridades de ambas compañías y Kicillof, participaron del acto que unió a Buenos Aires y Beijing, el embajador chino en Argentina, Zou Xiaoli, su par argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, y el subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo.

Kicillof que participó del acto acompañado por Sergio Berni porque el ministro es de Lima, destacó que «todos sabemos que sin energía no tenemos desarrollo ni futuro posible, por lo que es para mí un enorme placer acompañar esta firma».

Por su parte, el presidente de Nucleoeléctrica, José Luis Antúnez, remarcó la importancia de avanzar en acciones concretas «para que podamos abastecer la demanda eléctrica de Argentina con energía de base, limpia, segura y sustentable, y combatir los efectos del cambio climático que afecta al planeta».

El proyecto forma parte del Plan de Acción de Nucleoeléctrica Argentina, aprobado por el Poder Ejecutivo Nacional el pasado 23 de junio de 2021, y supone una inversión superior a los 8.000 millones de dólares. La particularidad y diferencia respecto a las otras centrales es que en este caso se utilizará uranio enriquecido como combustible y agua liviana como refrigerante y moderador.

Así, Atucha III tendrá una potencia bruta de 1200 MWe y una vida útil inicial de 60 años, y permitirá ampliar las capacidades nucleares nacionales gracias a la transferencia de tecnología para la fabricación de elementos combustibles. De acuerdo con los cronogramas previstos, las obras de construcción comenzarán a fines del corriente año y requerirán la creación de más de 7.000 empleos y una integración aproximada del 40% de proveedores nacionales