Escandalosa situación se vivió ayer por la tarde en el Bordo, entre el partido de Talleres de Perico y Redes de La Patria por el partido de vuelta del Regional Amateur. Sebastián Pisculichi sufrió un pelotazo fuerte a la altura del mentón y al momento de requerir la asistencia, la facultativa no se encontraba en la cancha, había firmado la planilla y se retiró del mismo. Algo insólito pero muy recurrente en este tipo de torneos. El partido fue suspendido cuando igualaban 0 a 0, por falta de garantías según el árbitro Gustavo Benítez que en ningún momento demostró estar a la altura de la situación.
El encuentro estaba previsto que inicie a las 17 pero el escenario no contaba con la ambulancia correspondiente y se esperó 30 minutos, luego la facultativa solo cumplió con su firma para que el duelo se disputará, pero por mala fortuna a los 32 ́ de la primera parte Pisculiche recibió un impacto de la pelota que lo dejó nocaut. Sin médica y una ambulancia sin chofer, que terminó manejando un jugador de Talleres, llevó a que se vivieran momentos de tensión en Güemes. Increíble pero cierto. El presidente de Talleres, anunció que iniciará acciones legales al club local y al médico, que debía estar presente en el partido.
“Es tremendo lo que pasó, sinceramente no lo puedo creer lo que pasó. Empezamos 30 minutos después de lo acordado porque no había médico, luego traen una ambulancia que no tenía chofer y que lo termina manejando un jugador de nosotros”, empezó declarando el entrenador Horacio Zingariello. “No tenía cuello ortopédico y el hombre de verde no quería suspender el partido”, lanzó claramente enojado el DT. “Luego nos dice que lo suspende porque no iba haber luz, creo que apenas cayó el chico este partido debía suspenderse”, marcó el técnico de Talleres. “No es humano, porque podría haber sido el hijo de él”, declaró Zingariello muy enojado con la situación. Y no es para menos, una situación que es insostenible por ningún lado. “Encima yo creo que apunto mucho más a la luz que a lo que sucedió con el chico, mira si le pasa algo más, quien se hacía responsable”, declaró el entrenador de Talleres. “Es un testarudo el árbitro, este partido no debía jugarse como vas a permitir que firme y se vaya el médico”, reiteró el DT del “Expreso”. Aunque marco, “Nosotros también fuimos pasivos porque debíamos haber estado ahí, metidos y diciendo que así no se podía jugar”. “Sería ilógico que este partido continúe porque estuvimos más de 50 minutos parados pero esta situación no puede quedar así y habría que denunciar al médico y a los árbitros también”, finalizó Zingariello.
