La medida llega el mismo día en el que el país registró una cifra de muertos por coronavirus que no contabilizaba desde diciembre del año pasado
Los peruanos no podrán juntarse a celebrar Navidad y Año Nuevo tras la prohibición de todos las reuniones y eventos sociales por parte del gobierno, una medida ordenada para contener la “grave” situación sanitaria que atraviesa el país andino, con cifras de muertos por coronavirus que no se veían desde diciembre del año pasado.
“Dispóngase la inmovilización social obligatoria de todas las personas en sus domicilios el sábado 25 de diciembre de 2021 y sábado 1 de enero 2022″ entre la 1 y las 4 de la madrugada, detalla la norma en el comunicado oficial.
En estas fechas estará prohibido “todo tipo de reunión y evento social, incluyendo las que se realizan en los domicilios y visitas familiares”, agrega el texto.
El ministerio de Salud de Perú registró 41 muertes en las últimas 24 horas, un número que no se registraba desde diciembre de 2020, según el medio local El Comercio.
La cartera reportó 1356 nuevos contagios, lo que elevó el conteo total de casos desde que comenzó la pandemia a 2.251.027. La cifra total de decesos es de 201.650, según el balance oficial.
Ante el aumento en las cifras, el Consejo de Ministro declaró el “Estado de Emergencia Nacional por las graves circunstancia que afectan a la vida de las personas a consecuencia de la Covid-19″, dice el texto oficial.
Desde ayer, las autoridades exigen que todo ciudadano mayor a los 18 años presente un carnet de vacunación que acredite que recibió ambas dosis de la vacuna contra el virus para poder ingresas a los lugares cerrados, como restaurantes, teatros, cines, centros comerciales y hasta trabajos presenciales con más de 10 empleados.
Las autoridades peruanas confían en que la exigencia del certificado incentivará a la población no vacunada a inmunizarse.