Madres catamarqueñas construyen casas de adobe

Mamás catamarqueñas levantan casas de adobe y la iniciativa surge de un proyecto municipal, que apunta a la construcción solidaria y sustentable.

Se está llevando a cabo en Fiambalá, y nace de la constante demanda de viviendas para madres que crían solas a sus hijos. La intendenta de esta localidad de 5000 habitantes, Roxana Paulón, explica que: “Trabajamos mucho con estas mamás que necesitan darle un hogar a sus niñas y niños. Incluso todos nuestros programas de viviendas ponen la vivienda a nombre de la mujer”. Además, se incluye a familias jóvenes que recién se están constituyendo y están en necesidad de un hogar propio.
Por el momento, el programa nuclea a quince familias que, en la mayoría de los casos, son monomarentales. Brenda, una de las integrantes, comenta que “surgió a partir de la necesidad de tener nuestros hogares y pensando en distintas estrategias surgió por parte del municipio la idea de por qué no construir nuestros propios adobes”.
Las mujeres aprenden la técnica del adobe y la aplican en un sistema solidario. Ellas realizan el adobe bloque por bloque. “Para que este sueño sea posible es necesario que las familias estén dispuestas a cooperar entre sí”, agrega Brenda.
Asimismo, resalta que “es muy importante como las mujeres vamos aprendiendo en qué consiste la técnica del adobe. Para nosotras el aporte del municipio es fundamental porque la compra de materiales está a cargo de ellos y nosotras ponemos el esfuerzo humano”. Gracias a esto, quienes participan ya se quedan con un conocimiento de construcción ancestral, que puede servirles para futuros emprendimientos.
La construcción por adobe sirve de aislamiento térmico. También es aislante acústico y de radiaciones electromagnéticas de alta frecuencia. Como es elaborado de manera manual, no exige un consumo de energía, lo que lo hace de bajo costo. Sus materiales son todos naturales, reutilizables y biodegradables.