Fuerte represión a las protestas contra el Gobierno en el segundo día de paro nacional

La policía y fuerzas de choque del oficialismo arremetieron contra los manifestantes en Cochabamba, Tarija, Santa Cruz, entre otros puntos del país. En Oruro, reprimieron a periodistas que realizaban una marcha pacífica.

La violencia continúa en el segundo día de paro nacional en Bolivia. Imágenes y videos difundidos en redes sociales muestran escenas de represión por parte de oficiales policiales y simpatizantes del oficialismo en distintas partes del país, como Cochabamba, Tarija, Santa Cruz y Oruro.

Según reportó El Deber de Bolivia, policías arremetieron e hicieron uso excesivo de la fuerza contra civiles que estaban siendo atendidos por un grupo de bomberos voluntarios en Santa Cruz. La represión ocurrió al mediodía en un punto de bloqueo donde había un grupo de mujeres, adultos mayores y algunos jóvenes.

Santa Cruz y Cochabamba han sido dos de las regiones donde más se han vivido los distintos acontecimientos del paro nacional. De hecho, en Santa Cruz se han registrado enfrentamientos entre las personas que participaban en los bloqueos y grupos que se oponen al paro, lo que ha obligado a las autoridades a llevar a cabo un fuerte operativo para prevenir conflictos.

Según informó el medio boliviano, como parte de las protestas se instalaron varios puntos de bloqueo en Santa Cruz. Un grupo de simpatizantes del Movimiento Al Socialismo llegó a uno de esos bloqueos, e intentó romper la barricada de llantas, piedras y escombros. Posteriormente se desató una batalla campal que dejó varios heridos de ambos lados.

Más tarde arribó la policía, que detuvo a un grupo de personas y después hizo uso de agentes químicos y lanzó agua con el vehículo antidisturbios conocido como Neptuno, ante gritos de desesperación de la multitud.

“Los masistas vinieron a provocar. Estábamos tranquilos bloqueando y vinieron a prender fuego y lanzarnos cohetes”, denunció a El Deber una de las personas que resultó herida.

Por otra parte, en Oruro, varios periodistas fueron reprimidos por los agentes de la Policía Boliviana durante una marcha pacífica en la que exigían que se les permita realizar su labor.

El 8 de noviembre, coincidiendo con el primer aniversario del autoproclamado gobierno de Jeanine Áñez -en la cárcel desde marzo a la espera de ser juzgada por diversos delitos, entre ellos los de terrorismo y sedición-, algunos sindicatos y la oposición en Santa Cruz, históricamente la más beligerante con los gobiernos del Movimiento al Socialismo (MAS), convocó protestas contra la Ley 1386, con la que el Ejecutivo pretende luchar contra el blanqueo de capitales.