Se derrumba el Cerro Rico de Potosí y como hace 476 años, la extracción de minerales no para

Miles de mineros ven peligrar su fuente de ingreso

Como hace 476 años, es la dinamita la que señala que en el Cerro Rico los mineros ya están trabajando. Es la señal de que otra vez se procesarán miles de toneladas de concentrados de plata, estaño, zinc y plomo. ¿La histórica montaña seguirá resistiendo tal presión?

En lo más alto del yacimiento ya si distingue la parte icónica incompleta de este símbolo que forma parte del Escudo Nacional. Le falta un gran pedazo de roca, que en las noches se busca disimular con unas luces que dan la falsa sensación de que aún esta montaña es un triángulo perfecto.

El cambio de la tonalidad de la tierra, que pasa de ocre a plomo denota un trabajo desesperado para tratar de sellar estas rajaduras y evitar el hundimiento. Una labor que llevó a poner en la zona dañada diferentes capas de membranas, pero que el viento las hizo volar.

En la zona, la geología determinó que de la cota 4.400 hacia arriba en el interior y exterior del yacimiento se encuentran los minerales (óxidos) de mayor calidad, concentrados de plata, estaño, zinc y plomo con una mejor ley.

El área es delicada y eso se sabe desde 2004, cuando se promulgó el Decreto 27787. En el tercer capítulo de su reglamento, referido a las Actividades de Exploración y Explotación en Superficie, se determina que entre las cotas 4.400 y 4.700 metros sobre el nivel del mar sólo se podrán efectuar labores de exploración, evaluación, explotación y remoción de desmontes, pallacos y sucus (minerales sueltos), sin afectar la roca dura. Pero la realidad es otra.

Nelson Gutiérrez, vicepresidente del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), señala que hablar de un derrumbe del Cerro Rico no es una exageración y protesta, porque lejos de dimensionar la gravedad del problema, se lo quiere minimizar.

Son 12 los hundimientos, de acuerdo con los registros de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol). Para Gutiérrez son más y lo preocupante es que en los últimos años se han dado con mayor frecuencia. ¿Por qué? Según el cívico por el no respeto del DS 27787 y también debido a las autorizaciones de Comibol Potosí a través de permisos (torno guías) para el ingreso a la cima del yacimiento y para realizar labores en el interior y exterior de los socavones, lo que daña la estructura del cerro.

Esta ‘fiebre por los óxidos’ se potencia por los excelentes precios internacionales de los concentrados que se extraen del cerro. De acuerdo con la Bolsa de Metales de Londres, al 21 de octubre, la onza troy de la plata cotizaba en $us 23,95; la libra fina de estaño a $us 17,645; la libra fina de zinc cuesta $us 1,62 y la de plomo $us 1,08.

En el caso de la plata, la cotización registra un alza que no se había visto desde el año 2013. A inicios del año pasado la libra fina costaba $us 17,85, lo que significa un aumento de un 28,8%. Mientras que, el precio de la libra fina de estaño en agosto de 2019 estaba en $us 6,69, la de zinc $us 1,08 y la de plomo $us 0,92.

Estos valores, a criterio Eugenio Mendoza, presidente de la Comibol, van a superar los $us 140 millones que la actividad minera del cerro genera en ingresos de divisas al país y que llegan al departamento de Potosí por concepto de regalías un 85%, mientras que al municipio de Potosí un 15%, haciendo unos $us 4,4 millones.

Ramiro Villavicencio, ministro de Minería, asegura que, de acuerdo con el mandato del presidente Luis Arce, al problema potosino se le debe encontrar una solución técnica, científica y definitiva.

Para ello la autoridad ve que tres son las tareas a realizar. La primera, concretar un escaneo en 3D en el interior del cerro para que se identifique la situación geofísica de la misma. El segundo paso es trabajar para encontrar el material adecuado para el relleno de las zonas con rajaduras y el tercero tiene que ver con el traslado de 2.200 mineros que trabajan por encima de la cota 4.400.

El exministro de minería Epifanio Mamani, que encabeza la Comisión de Restauración y Rehabilitación del Cerro Rico, sabe que el tiempo apremia y que el cerro se puede quedar sin su cúspide. Por ello, este lunes 25 de octubre, en La Paz se firmará un acuerdo con la empresa Contec, que será la encargada de realizar los estudios 3D a los que se refiere Villavicencio.