Margarita Barrientos pidió ayuda para no cerrar sus comedores

La fundadora de Los Piletones describió la situación desesperante en los establecimientos que tiene en Santiago del Estero y Cañuelas. “No puedo más”, expresó. Desde el Ministerio de Desarrollo Social garantizaron la provisión de alimentos y mercadería.

Margarita Barrientos, fundadora del comedor social Los Piletones, se expresó este jueves conmovida por la situación económica que atraviesa, por la cual tuvo que cerrar dos comedores: uno en Cañuelas y otro en Santiago del Estero. Según relató, durante el último tiempo buscó ayuda “silenciosamente” para que el Estado mantenga los subsidios que recibía y, sin embargo, “nadie” le respondió. “Me causa mucho daño”, aseguró.

“Desde que empecé a cerrar los comedores estoy cayendo en una terrible tristeza porque soy la que tiene que poner la cara para decirle a la gente que hizo una cola desde las 7 de la hoy que no alcanzó la comida”, expresó durante una entrevista con radio Rivadavia y agregó: “Necesitamos que nos ayuden para poder seguir trabajando. No quiero cerrar el comedor de Santiago del Estero. Quiero ver que esa gente reciba su comida, su desayuno”.

Uno de los comedores que Barrientos tuvo que cerrar se encontraba en el barrio Los Pozos, en Cañuela, donde “la gente sigue rezando para que yo pueda volver a abrir el comedor. Eso me da una pena enorme”. Los mismo sucedió en Santiago del Estero, donde tenía otro comedor que alimentaba a 400 personas y “no podía mantenerlo”. En esa provincia sólo pudo sostener un hogar de abuelas y un jardín pero advirtió que peligra su continuidad.

“Últimamente, las 24 horas del día, estoy con la voz quebrada porque esto me afecta mucho en todo sentido. Sólo pensar en la gente y que no voy a volver a abrirlo y la ayuda no llega. No sabemos cómo seguir solventándolo a estos comedores. Es muy triste. A veces digo que no voy a volver a Cañuelas hasta que pueda abrirlo porque me hace mucho daño”, describió.

Consultada sobre la respuesta del Estado ante su reclamo respondió: “He buscado silenciosamente que me ayuden porque decía, en algún momento sabiendo cómo trabajo, lo que hice, ya van a ser 26 años, alguien va a decir vamos a seguir ayudando a Santiago del Estero con el subsidio, como venían haciendo. No se acercó nadie y esto me lleva a decir ‘no puedo más’. No ha sido fácil para mi”.

“Han sido los únicos (el periodismo) que se han hecho eco a todos mis pedidos. A todos los periodistas estoy muy agradecida porque siempre han sido ustedes los que me han ayudado”, agregó.

A raíz de las repercusiones que tuvo la entrevista, desde el Ministerio de Desarrollo Social confirmaron a un diario porteño que en las próximas horas está previsto que Nación envíe alimentos para abastecer a todos los comedores que administra Barrientos.

En otra parte de la entrevista, le preguntaron sobre su relación con su ex presidente Mauricio Macri y la posibilidad de que la haya perjudicado para poder acceder a la ayuda del Estado, respondió: “La verdad que si me tuvieran que castigar, que sea a mí y no a la gente. No tiene nada que ver la gente que necesita con lo que yo haya apoyado a Macri. En esa parte serían muy crueles. Que me digan cualquier cosa de otra manera pero no castigando a la gente”.

“Lo que necesitamos es que nos ayuden para poder seguir trabajando. No quiero cerrar el comedor de Santiago del Estero. No lo quiero cerrar. Quiero ver a esa gente que reciba su comida, su desayuno. Quiero llegar al comedor a la 7 de la hoy y ver a la gente que está haciendo cola y feliz porque sabe que va a desayunar”, reclamó Barrientos. En particular, el comedor que le quedó en esa provincia, según relató, recibe un camión con alimentos que envían desde Los Piletones porque allí no reciben ayuda del Estado. “Es un gran sacrificio el que hacemos”, resaltó.