Trotta ponderó el compromiso de volver a la «presencialidad cuidada»

El ministro de Educación se refirió así a la vuelta a las aulas, y destacó los índices que se establecieron para habilitar o no ese retorno, porque según apuntó "no pueden existir 24 políticas sanitarias epidemiológicas en la Argentina".

El ministro de Educación, Nicolás Trotta, ponderó este lunes el compromiso de la «mayoría de los gobernadores» de condicionar el regreso de los estudiantes a las aulas a los «marcos epidemiológicos aprobados» y a la situación sanitaria de cada distrito.

Además, reivindicó la posición del Gobierno de que «sea la ciencia la que marque» el camino a seguir, e insistió con la necesidad de implementar una «presencialidad cuidada», con «variables objetivas» que fijen la hoja de ruta.

Con la expectativa puesta en la vuelta de los alumnos a las escuelas del conurbano bonaerense, el miércoles próximo, la provincia de Buenos Aires aceleró el fin de semana los turnos de vacunación para la totalidad de docentes y auxiliares inscriptos.

«El compromiso del gobernador (Axel) Kicillof, como el de la inmensa mayoría de los gobernadores, yo diría 23 de las 24 jurisdicciones, es retomar la presencialidad respetando los marcos epidemiológicos aprobados», aseguró Trotta en declaraciones a Radio Nacional y destacó que Kicillof pondrá en práctica una «presencialidad cuidada».

También este lunes, la directora general de Cultura y Educación bonaerense, Agustina Vila, planteó que «priorizar» la educación «no se trata de presencialidad sí o no», sino de entender «qué se hace» durante la presencialidad y «de qué forma se opera para garantizar el derecho a la educación» cuando es necesario implementar la virtualidad.

En declaraciones formuladas a radio Con Vos, la funcionaria respaldó el regreso a partir del miércoles próximo a las aulas, bajo una «presencialidad cuidada» en el AMBA.

El compromiso de «la inmensa mayoría de los gobernadores» es «retormar la presencialidad respetando los marcos epidemiológicos aprobados»

Indicó que «el Plan Jurisdiccional para el Regreso Seguro a Clases Presenciales establece una serie de pautas obligatorias para todas las escuelas: uso de tapabocas, distanciamiento entre docentes y estudiantes, adecuada ventilación».

«Con muchísimo cuidado, compromiso y priorización por la educación se buscó siempre (articular) las condiciones epidemiológicas y educativas, trabajando para el cuidado, limpieza y ventilación de los edificios; con pautas de capacitación para que estudiantes, docentes y auxiliares habiten de manera distinta la escuela», describió.

Trotta explicó también que la vuelta a las escuelas en el conurbano pudo decidirse a partir de que se registró una tasa de incidencia (de contagios) inferior a 500 casos cada 100 mil habitantes y que la ocupación de camas de cuidados intensivos no supera el 80%.

En cambio, si esos índices empeoraran habría que «adoptar medidas más restrictivas», aseguró Trotta, quien reafirmó la idea del Gobierno de que «no pueden existir 24 políticas sanitarias epidemiológicas en la Argentina».

Sobre este punto, criticó la «apatía» del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, por «no asumir las medidas necesarias» para restringir la circulación.

«Frente al impacto de la segunda ola y un inicio de un proceso de politización de lo más berreta en cuanto a la presencialidad, la no presencialidad, establecimos variables objetivas para que sea la ciencia la que nos marque el equilibrio justo entre el derecho a la educación con la presencialidad, que es tan importante, pero también el cuidado de la salud, en una política sanitaria única en Argentina», explicó el ministro.

Para Trotta, «las malas decisiones de un gobernador, o en este caso de un jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, no afectan solo a los porteños y las porteñas sino que han implicado una aceleración en la irradiación del Covid-19».

«Y aquí todo el conflicto nace frente a la apatía de Larreta de no asumir las medidas necesarias para restringir cierta circulación que permitan contener la curva de contagios», afirmó Trotta.

Frente a las acusaciones de Mauricio Macri, quien reclamó que «todas las escuelas deben estar abiertas», Trotta respondió que «el expresidente debería entender que hay localidades que están con sus servicios de salud saturados» y que no es una «cuestión de pertenencia del intendente o no a una fuerza política».

«JxC se la pasó poniendo palos en la rueda desde que empezó la pandemia. Hasta la semana pasada pedían que vuelvan las clases presenciales en el AMBA. Ahora que vuelven -no por especulación política sino porque mejoraron los indicadores- piden que regresen los distritos que están en fase 2, cosa que no se puede», dijo por su parte el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, a radio Provincia.

«Hoy tenemos 960 camas libres en el AMBA y 490 en el interior, son niveles altos y preocupantes», indicó, pero enfatizó que las medidas que dispuso el presidente Alberto Fernández y que la provincia implementó «dieron resultado y evitaron que explotara por los aires el sistema sanitario».

En cambio, evaluó que Rodríguez Larreta «tomó la decisión política de no respetar la ley», lo que calificó de «gravísimo».

El viernes último el Gobierno porteño anunció flexibilizaciones para la circulación y varias actividades en CABA y ratificó la continuidad de la modalidad presencial en jardines maternales y en educación inicial, primaria y especial, en tanto que los secundarios aplicarán un sistema «bimodal» -presencial y virtual-.

En la provincia de Buenos Aires, según explicó Kicillof en los últimos días, la apertura de los colegios obedeció a que se registró un «descenso de contagios de coronavirus del orden del 30% en las últimas tres semanas» y a que la provincia dejó de ser una zona de «alarma epidemiológica».

Según precisó, en la provincia de Buenos Aires se pasó de 12 mil casos a 8.700 promedio la última semana, lo que hace que en el conurbano, en los últimos 15 días, haya 401 casos cada cien mil habitantes, lo que permite salir de la alarma epidemiológica.

Es que el DNU con medidas de cuidado para mitigar el avance del coronavirus establece un semáforo epidemiológico, de acuerdo con el cual se establecen tipos de restricciones según la situación sanitaria en cada distrito.

De cara al regreso a las escuelas en el AMBA, la provincia de Buenos Aires contará con medidores de dióxido de carbono en 33 mil establecimiento educativos y un Plan de Vigilancia Epidemiológica Activa.

Los municipios del conurbano pasaron de Fase 2 a Fase 3 y desde hoy docentes y personal auxiliar empezaron a regresar a las instituciones educativas para planificar cómo se darán las clases desde el miércoles.

La provincia implementará un Plan de Vigilancia Epidemiológica en las Escuelas, a través de testeos aleatearios, que servirán como muestra de la situación epidemiológica en las instituciones educativas.