Luis Lacalle Pou respondió a las críticas de quienes le cuestionan su estrategia de “libertad responsable”

En una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, el presidente manifestó que espera un mayor descenso de casos de COVID-19 en el país

El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, afirmó este miércoles que cuestionar el uso de la “libertad responsable”, que él ha defendido desde el inicio de la pandemia frente a la aplicación de medidas coercitivas, es ir contra la sociedad misma.

“¿Alguien entiende la vida en sociedad sin libertad responsable? Es la vida misma en sociedad. (…) Me parece ilógico decir: ‘Ha fracasado la libertad responsable’, como he leído estos días. Es grave, porque significa que fracasamos como sociedad”, respondió en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros celebrado en la Torre Ejecutiva de Montevideo.

El mandatario reiteró que no está “conforme” con la reducción de la movilidad, pese a que consideró válidas las medidas tomadas por el Ejecutivo en su momento y que, anunció, siguen vigentes hasta mediados de mayo.

“Si bien hay un descenso, aspiramos a que sea mayor. Tenemos una luz, que es la baja de casos en el personal de la salud, que es notoria, y tenemos una vacunación avanzada. Estamos un escalón más abajo, no el que querríamos tener; por eso las medidas se extienden hasta el 16 de mayo y la única que retomamos es la educación por etapas”, indicó.

Además, las fronteras del país siguen cerradas para extranjeros no residentes, salvo por permisos excepcionales concedidos bajo expresa autorización del Ejecutivo por cuestiones diplomáticas, personales o económico-laborales.

En la rueda de prensa también participaron el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas; el de Educación y Cultura, Pablo da Silveira; y el responsable de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Robert Silva.

El retorno a la presencialidad de la educación, que había sido analizado en los últimos días, fue confirmado por el mandatario y el titular de la cartera, quienes expusieron un plan progresivo de reincorporación a las aulas desde el 3 de mayo, inicialmente para escuelas rurales con un solo docente, lo que implicaría a un máximo de 6.000 alumnos.