Bolivia retomará lucha anti drogas del gobierno de Morales

El gobierno del presidente Luis Arce retomará el modelo de lucha antidroga que dejó la administración de Evo Morales tras nombrar a un dirigente cocalero como encargado de esa tarea, se informó.
Bolivian soldiers destroy a coca plantation in Chimore, Chapare, central Bolivia, on February 26, 2016. AFP PHOTO/AIZAR RALDES / AFP / Aizar Raldes Nunez

Arce, quien fue exminsitro de Economía de Morales, juró como presidente el 8 de noviembre tras ganar las elecciones del 18 de octubre con 55% de los votos. En una reciente entrevista resaltó que la lucha contra las drogas será uno de los puntos en que coincidirá con lo hecho por la administración de Morales (2006-2019).

La víspera, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, juramentó a Jaime Mamani Espíndola como viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, destacando que “las cosas que hay que mejorar, se mejorarán”, en la lucha antidrogas.

Mamani es dirigente del sindicato de cocaleros de las Seis Federaciones de Cocaleros del Trópico de Cochabamba, al centro de Bolivia, que lidera Morales, sumando una fuerte presencia de dirigentes de ese sector en el gobierno.

El martes, el senador Leonardo Loza fue nombrado secretario del Comité de Seguridad del Estado y Lucha Contra el Narcotráfico del Senado y Andrónico Rodríguez, presidente de la Cámara de Senadores. Ambos forman parte del sindicato de cocaleros.

“Vengo de los movimientos sociales del trópico de Cochabamba y mi compromiso con nuestro país radica en las múltiples luchas y resistencias de mi región contra el avasallamiento de la gente de la DEA (Administración para el Control de Drogas) … en los años 90”, dijo Mamani.

Morales impulsó una política antidrogas con “la racionalización y el control social para disminuir cocales… con una concertación con los productores”, explicó Del Castillo. Durante su gobierno de casi 14 años prescindió de la ayuda de Estados Unidos y expulsó a la agencia antidrogas de ese país por presunto espionaje.

Sin embargo, en el ultimo año de su gobierno hubo un incremento del 10% de la producción mientras que los conflictos políticos y sociales de finales del 2019 expandieron más la producción de la hoja, materia prima de la cocaína, según un informe de julio de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).