Quién es el sindicalista que está detrás del desabastecimiento de lácteos

Héctor "Etín" Ponce, líder del gremio lechero, fue albañil, mozo, relator de boxeo y periodista. En su carrera hay episodios de violencia, sospechas e investigaciones judiciales. Llegó a ser uno de los dirigentes favoritos de Cristina Kirchner y se peleó con Moyano

¿Quién es el sindicalista que está detrás de las medidas de fuerza que provocarán desabastecimiento de lácteos? Se llama Héctor Ponce, le dicen “Etín” y es el secretario general de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), un cargo al que llegó en 2002 tras haber sido albañil, mozo, relator de boxeo y periodista.

La protesta, que finalmente se levantó porque el Ministerio de Trabajo declaró la conciliación obligatoria, puso bajo la lupa nuevamente a un polémico dirigente, de perfil bajo pero con una trayectoria en la que se mezcla la actividad sindical con el esponsoreo de boxeadores como Maravilla Martínez, la organización de desfiles y recitales en el polideportivo de ATILRA y una fuerte pasión por los viajes que lo llevó a publicar las fotos de sus travesías por todo el mundo en la revista del gremio.

Ponce asumió al frente de ATILRA en 2002 cuando desplazó en elecciones al que era su jefe, Vicente Troncoso, y ganó nuevamente los comicios del sindicato en 2018, por lo que su actual mandato vencerá en 2022. Claro que ese 93,83% de los votos que obtuvo la única lista que se presentó refleja tanto su respaldo como, en el fondo, la dificultad de presentar una nómina opositora: para ser candidato a miembro del consejo directivo nacional se debe haber sido dirigente de ese cuerpo o secretario de una seccional, requisito del estatuto que, en la práctica, torna casi imposible la competencia interna.

Nacido en Santiago del Estero hace 64 años, “Etín” adoptó a Sunchales, Santa Fe, como su ciudad preferida, y en su vida hizo prácticamente de todo: fue albañil, mozo, relator de combates de boxeo y periodista deportivo antes de trabajar en la empresa Sancor, donde comenzó una carrera sindical como delegado hasta llegar a manejar el sindicato, de unos 25.000 afiliados.