Cuando el final de su contrato podía significar el cierre de su paso en Gimnasia y Esgrima de Jujuy , Gonzalo Gómez recibió una grata noticia: Arnaldo Sialle le anticipó que desea contar con él para el próximo campeonato de la Primera Nacional. Por eso ya hubo avances significativos para que continúe en el club de barrio Luján durante la temporada 2021.
Sin embargo, el arquero de 34 años tiene en claro que su contrato tendrá una modificación sustancial en relación con el que se vencerá el próximo martes. La dirigencia «Albiceleste» que tiene como caras visible en este tipo de situación a Daniel Esteban Ramasco (Director Deportivo) y Atilio Córdoba vicepresidente del club, ya le manifestaron el deseo para que siga vinculado a Gimnasia.
La renovación del jujeño Gonzalo Gómez representa una suerte de caso testigo del nuevo escenario que se viene en cuanto a contratos en el fútbol argentino. Ya no habrá lugar para cifras elevadas. Y los presupuestos, en mayor o menor medida, se achicarán en todos los clubes y el «Lobo» no será la excepción .
En el inicio de la temporada, bajo la conducción de Marcelo «Popeye» Herrera, Gonzalo Gómez realizó la prueba pero pudo quedarse, aunque un tiempo antes de comenzar el campeonato el DT de aquel momento decidió convocar a último momento. Se sumó como tercero por detrás de Carlos Morel y Carlo De Giorgi. De a poco fue ganando lugar con la lesión de Morel y el bajo rendimiento del cordobés, llegó su chance frente a Chacarita donde pudo mantener el cero en su arco, luego con Brown de Adrogué que evitó la derrota pero en los tres encuentros finales no fue de lo mejor, al igual que el resto del equipo. Jugó cinco partidos (450 minutos disputados).
«Es algo muy importante por como esta el futbol argentino que el entrenador me tenga en cuenta», destacó el arquero. «Me pone muy contento, es un honor y placer seguir en Gimnasia de Jujuy», dijo Gómez. «Sinceramente me da una tranquilidad enorme tanto en lo personal como en lo familiar, mucho más en estos tiempos», lanzó el jujeño con pasado en varios clubes de Mendoza.
Por otro lado se refirió a la sensación que produce el aislamiento obligatorio, que transita la provincia en fase 1 «No es nada fácil para nosotros que estamos acostumbrados a trabajar con nuestro cuerpo. Somos de tener mucho contacto, movimiento pero uno trata de mantenerse en ritmo porque debemos adaptarnos al espacio con el que tenemos», indicó el uno.
«Son decisiones, los que jugamos al futbol sabemos que esto puede pasar pero siempre son momentos difíciles. A finalizar cada torneo es algo a lo que estamos acostumbrados», en referencia a la salida masiva de sus compañeros. «Nadie puede garantizarte el puesto, ya es una bendición poder seguir con club pero trabajaré como lo hice siempre porque es una tranquilidad de tener trabajo en estos momentos de pandemia», cerró el arquero que seguirá después del 30 de junio.