Asesinado a balazos Preventiva a uno de los acusados por el crimen del gendarme jujeño

Fue dictada para un adolescente de 16 años, uno de los dos acusados de haber participado en el crimen del comandante de la Gendarmería Nacional (GN) Marcos Antonio Castillo, oriundo de La Quiaca.

Una jueza dictó la prisión preventiva para un adolescente de 16 años, uno de los dos acusados de haber participado en el crimen del comandante de la Gendarmería Nacional (GN) Marcos Antonio Castillo, asesinado a balazos hace una semana en el centro de la ciudad bonaerense de Zárate, informaron fuentes judiciales.

La decisión fue tomada por Bárbara Halecka, a cargo del Juzgado de Garantías del Joven 1 del citado departamento judicial, tras un pedido del fiscal Gustavo Ancurio que investiga al acusado.

Fuentes judiciales informaron que el funcionario judicial tenía cinco días para decidir la situación procesal del adolescente desde el momento de su detención.

El fiscal Ancurio, titular del Fuero de la Responsabilidad Penal Juvenil 1 de Zárate-Campana, solicitó la prisión preventiva por el delito de «homicidio en ocasión de robo agravado por el uso de arma de fuego», lo cual fue otorgado por la magistrada.

Este adolescente ya había sido detenido en febrero por balear a otro hombre pero en aquel momento tenía 15 años y por lo tanto era inimputable.

En tanto, la fiscal Andrea Palacios que investiga al mayor, identificado como Pablo Agustín Arcel (19), tiene 15 días para decidir si realiza el mismo pedido, prorrogable por otros 15 días.

La semana pasada, ese acusado se negó a declarar en la causa caratulada «homicidio en ocasión de robo agravado por el uso de arma y por la participación de un menor de edad».

Por otra parte, los forenses de la Policía Científica reportaron a los fiscales que la causa de muerte de Castillo fue un «paro cardiorrespiratorio traumático» como consecuencia de una «herida de arma de fuego en el cráneo».

Tal como habían observado los peritos que trabajaron el martes en la escena del crimen, los médicos legistas confirmaron en la morgue que fueron dos los disparos que recibió la víctima: el mortal, que entró en el cráneo por arriba de una ceja y tiene orificio de salida, y uno en el pómulo derecho que quedó alojado.