Los productores rechazaron los aranceles de EEUU al biodiésel argentino: “No hay dumping ni subsidios a las exportaciones”

Desde la Cámara Argentina de Biocombustibles (CARBIO), expresaron que "no existieron ni existen condiciones de dumping ni de subsidios en las exportaciones de biodiésel de soja”

Los integrantes de la Cámara Argentina de Biocombustibles (CARBIO) rechazaron la decisión del Departamento de Comercio de Estados Unidos de desechar la revisión de cambio de circunstancias solicitada oportunamente por el gobierno nacional, ya que según expresaron desde la entidad en un comunicado, «no existieron ni existen condiciones de dumping ni de subsidios en las exportaciones de biodiésel de soja”.

Al mismo tiempo, el Consejo Nacional del Biodiésel (NBB, National Biodiésel Board), la asociación que reúne a todas las empresas en Estados Unidos vinculadas a la cadena del biodiésel, incluidos los productores, los proveedores de materias primas y los distribuidores de combustible, declaró su apoyo a la decisión tras haber “luchado arduamente” para llegar al resultado de la decisión de su gobierno.

En su momento, las ventas de biodiésel argentino a Estados Unidos llegaron a representar USD 1.200 millones, transformándose en el principal producto de exportación a ese país. Se trata de un mercado fundamental para la cadena productiva de la soja. Acceder al mercado estadounidense es muy relevante, porque tiene una alta demanda que sostiene los precios. La Argentina ha demostrado ser muy competitiva

Por otro lado, desde CARBIO recordaron que en el proceso administrativo mencionado y que se inició hace dos años, “existe adicionalmente un caso abierto en la Corte de Comercio Internacional en Nueva York donde las empresas exportadoras de biodiésel cuestionan la investigación de dumping. De tal manera, ambos derechos compensatorios y de antidumping seguirán siendo evaluados en los procesos judiciales y administrativos correspondientes en Estados Unidos», señalaron.

“Reafirmamos nuestro compromiso por alcanzar entendimientos beneficiosos para todas las partes”, dijo Luis Zubizarreta, presidente de CARBIO. Por otro lado, la entidad destacó el apoyo y la labor que la Cancillería y la Embajada argentina en Estados Unidos realizan constantemente para alcanzar esta meta.

Desde los comienzos de 2018, Estados Unidos había decidido aplicar derechos antidumping y compensatorios que, sumados, llevaron los aranceles para el biodiésel argentino por encima del 130%. Luego de que se modificara el régimen en la Argentina para aumentar las retenciones al biodiésel y con ello eliminar los incentivos para el exportador, los productores locales hicieron una presentación por “cambio de circunstancias” para pedir que se revise esa decisión.

En julio de 2019, se conoció una decisión preliminar que preveía eliminar los derechos antidumping pero mantener los derechos compensatorios. Pocos días atrás, esa resolución fue revertida y se decidió mantener ambos aranceles en el nivel original. El Departamento de Comercio determinó que el “cambio de circunstancias” no era lo suficientemente relevante para modificar el régimen arancelario.

No existieron ni existen condiciones de dumping ni de subsidios en las exportaciones de biodiésel de soja
“En su momento, las ventas de biodiésel argentino a Estados Unidos llegaron a representar USD 1.200 millones, transformándose en el principal producto de exportación a ese país. Se trata de un mercado fundamental para la cadena productiva de la soja. Acceder al mercado estadounidense es muy relevante, porque tiene una alta demanda que sostiene los precios. La Argentina ha demostrado ser muy competitiva”, comentó una fuente del sector de los biocombustibles.

Desde CARBIO, también hicieron mención a un caso similar que sucedió con la Unión Europea, hace pocos años, » donde hubo un reconocimiento legal que no existen subsidios a las exportaciones de biodiésel de la Argentina», comentaron. Al estar vedado el mercado de Estados Unidos, con el grave impacto que implica en materia de ingreso de divisas al país, el principal cliente externo para el biodiésel argentino es la Unión Europea, que hoy demanda muy poco volumen como consecuencia del coronavirus.