La pandemia de coronavirus atentó contra el fútbol en general. Los clubes cerraron sus puertas, se suspendieron los torneos y los entrenamientos quedaron limitados a las posibilidades de cada uno de los jugadores de moverse en el espacio del que disponen en sus casas y en el caso del futbolista Maki Salces se encontraba en Mendoza siendo parte del plantel de Gimnasia, pero decidió retornar a la provincia y luego de transitar la cuarentena, se entrena junto a los especialistas Sebastián Abraham y Leandro Calvetti para encontrar su mejor forma física.
Las redes sociales y las diferentes plataformas virtuales colaboraron para que esa distancia se acorte, permitiendo el envío de rutinas físicas de parte de los profesionales o incluso la realización de entrenamientos en conjunto a través de una pantalla. Pero en el caso del ex “Lobo”, Maki Salces optó por regresar a Jujuy y aprovechar las ventajas con las que cuenta la provincia para intensificar su entrenamiento y estar condiciones para cuando la pelota vuelva a rodar.
“Fue muy difícil poder ingresar a la provincia, pero más que nada por mi hijo, que es chico y le cuesta entender”, relató el ex Gimnasia de Jujuy. “Por suerte esa etapa ya pasó y ahora quiero solo enfocarme en poner condiciones con los profes”, confesó Maki Salces.
“Tengo un año más en Mendoza por esa parte uno está tranquilo pero el esfuerzo ahora debe ser el doble porque Gimnasia confió en mí y yo debo ahora buscar tener más minutos en cancha”, cerró el volante jujeño, quien se desempeña como profesional en el Lobo mendocino.
