Ayer conoció causa de imputación en la Fiscalía con sede en el barrio Alto Comedero de nuestra ciudad. Según las fuentes judiciales, la joven de 26 años, a fines de febrero último se había comprado una casa y en marzo la pareja había decidido convivir, justo antes de la emergencia sanitaria por la pandemia del coronavirus. Si bien la investigación se encuentra en pleno proceso, se pudo saber que con los datos que se fueron desprendiendo y las declaraciones que se tomaron, todo apunta a un crimen y las pesquisas no descartan la participación de otra persona.
De la IPP se desprendió que aproximadamente a las 3.40 del domingo pasado un vehículo marca Ford Ecosport de color azul se estacionó en la playa del hospital “Carlos Snopek” del barrio Alto Comedero y una joven pidió ayuda a los enfermeros. Dentro del vehículo había un joven con un disparo en la cabeza, los enfermeros y una efectivo policial inmediatamente trasladaron al joven a la sala de cuidados intensivos para ser intervenido quirúrgicamente, pero nada pudo hacerse para salvarle la vida a Villafañe, ya que a causa del disparo perdió masa encefálica. Las mismas fuentes judiciales confirmaron que Quiroga Saenz huyó del lugar con la camioneta, que según se supo, está a nombre de su madre y estuvo más de 14 horas prófuga.
En todo ese lapso la mujer eliminó sus cuentas en todas las redes sociales y varios llamados y mensajes de WhatsApp de su teléfono celular. Además, se supo que llamó a su madre y le dijo que todo “había sido un accidente”, que el arma que ella manipulaba se había disparado, pero recién alrededor de las 18 en compañía de su madre, se entregó en la sede policial del barrio Alto Comedero, luego de tomar conocimiento que los efectivos de la Brigada de Investigaciones la tenían prácticamente cercada.
Cristian Villafañe, hermano mayor de la víctima, aclaró que ni el vehículo en el que llegó al hospital ni el arma de fuego con el que fue ultimado le pertenecían. “Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias con todo esto, queremos saber qué fue lo que pasó con mi hermano.
Vi en algunos medios de comunicación que la versión que dio la madre de la novia de mi hermano es que había sido un accidente, pero todo dejamos en manos de la Justicia y esperamos que todo se esclarezca”, dijo Cristian Villafañe. El fiscal Diego Cussel solicitó el secuestro del vehículo y del teléfono celular tanto de Quiroga Saenz como de Villafañe y fueron llevados para el Departamento de Criminalística del Ministerio Público de la Acusación, donde son peritados. Vale aclarar que con las herramientas informáticas que cuenta nuestra provincia, por más que se hayan eliminado publicaciones o llamados desde un teléfono celular, quedan registrados y se los puede recuperar.