“Este es el resultado de no registrar en Jujuy caso positivo alguno hace más de un mes, lo que implica que no hay circulación comunitaria del virus”, afirmó.
Explicó que el protocolo para este sector resguarda a clientes y trabajadores por igual, al establecer distanciamiento no menor de 2 metros entre mesas, reducir en un 50% la capacidad habilitada de los locales, reemplazar manteles y servilletas de tela por elementos de papel, implementar un menú electrónico o plastificado, uso de barbijo por parte de mozos e incentivar el uso de mecanismos de pago electrónico, entre otras medidas de estricto corte preventivo.
Aclaró que no hay limitaciones en cuanto a la cantidad de comensales por mesa, siempre y cuando “no se ocupen las puntas para así no afectar el distanciamiento y los espacios”.
Respecto de los costos que representará la instrumentación de estas medidas, indicó que “la rentabilidad no será igual a la de otros tiempos”, pero advirtió que “es mejor así a la sola actividad por delivery que reportaba solamente el 10% o 15% de la ventas habituales”.
“En este tiempo hicimos un esfuerzo descomunal para no reducir la cantidad de personal y ahora esperamos seguir así”, completó.
Además, señaló que el protocolo autorizado es de perfil inclusivo, es decir abarca desde restaurantes hasta sandwicherías de barrio.
Finalmente, Ortiz dijo que se está avanzando en la elaboración de un protocolo para establecimientos hoteleros que, en principio, volverán a funcionar con clientes de Jujuy.