Piden fabricar pan con sal yodada para cumplir con la ley

La norma provincial 8103 se reglamentó en septiembre de 2019 y obliga a los comercios salteños a dejar la sal industrial sin yodo.

El déficit nutricional de yodo en los salteños entró nuevamente en la agenda de noticias.

La Ley 8103, que se aprobó en 2018, y que se reglamentó en septiembre del año pasado obliga a las panaderías de todo el territorio provincial a usar sal yodada para la elaboración de todos sus productos.

Los desórdenes por déficit de yodo afectan especialmente en la región NOA, lo que ha sido reconocida por el Centro Nacional de Investigaciones Nutricionales. Una ley de 1967, implementada en 1970, ordena la yodación de la sal para consumo humano, aunque aún no se cubren las recomendaciones de ingesta diaria.

«La población debe saber que todos los productos industrializados se elaboran con sal sin yodo. Todo lo que compramos y comemos que está refinado no tiene nada de yodo», dijo la legisladora Isabel de Vita, quien logró que se aprobara y reglamentara la norma para que las panaderías salteñas utilicen la sal yodada.

«La deficiencia de yodo es la principal causa de daño cerebral y retraso mental, hipotiroidismo, afecta el normal desarrollo físico y cognitivo produciendo discapacidad psicomotora, autismo, sordomudez, estrabismo, depresión, ansiedad y hasta bajo rendimiento escolar. En las embarazadas, puede conducir a abortos espontáneos, anomalías congénitas en el feto, con retrasos físicos o mentales irreversibles. Los grupos vulnerables son las mujeres en edad fértil, embarazadas, mujeres en períodos de lactancia y niños en edad escolar», dijo Sonia De Vita que fue quien argumentó el proyecto de ley.