Polémico: Queman a los muertos a cielo abierto

Hay espectadores forzados de la quema en bateas de metal de los restos de sus parientes. Observan el retorcerse de sus cuerpos envueltos en llamas en el Cementerio General de Potosí.

El espectáculo es terrible y doloroso para quienes lo han sufrido; espectadores forzados de la quema en bateas de metal de los restos de sus parientes, del retorcerse de sus cuerpos envueltos en llamas en el Cementerio General de Potosí.

Cuando el alquiler del nicho se vence, el ataúd es exhumado y la familia notificada. Para proceder con la incineración, que se hace en el mismo camposanto, al menos un pariente debe presentarse el día fijado con un galón de diésel y presenciar la operación si es que quiere recuperar las cenizas.

La familia, además, debe cancelar entre Bs 300 y Bs 500 a los obreros encargados de la operación, y proporcionales coca, cigarros y alcohol para que afronten la espeluznante tarea. A la semana se incineran entre 10 y 15 cuerpos, según el concejal Eloy Relos.

Los reclamos por la carencia de este aparato en esta necrópolis —que empezó a funcionar el 11 de mayo de 1909, es decir hace 110 años—, estallan de forma cíclica en la capital potosina.

“Es una pena, uno tiene que ir a reconocer a sus difuntos a cremarlos de una forma tan rudimentaria. Tener que enterrarlos en condiciones peores que en el área rural. Por favor, pidamos condiciones, un nuevo cementerio.

Este ya rebasó sus condiciones. (Se necesita) un crematorio y condiciones, tanto para los trabajadores como para la población”, escribió en Facebook la usuaria Grace S. C.

“En el Cementerio General de Potosí no se crema, se quema a los muertos, en batea, con combustible y encendiéndoles fuego. Es muy doloroso ver a nuestros seres queridos de esa manera”, resumió Relos.

Quienes no desean pasar por la terrible experiencia optan por trasladar los restos al camposanto de Sucre, que cuenta con un horno desde 2013. Todo el proceso puede llegar a costar Bs 5.000, “un costo muy alto, por eso Potosí exige la compra un crematorio”, añadió el concejal.

Hace un par de semanas el administrador del cementerio, Lucio Contreras, dijo que el perfil del proyecto ya fue concluido y remitido al Ejecutivo edil. Según el legislador local, el alcalde transitorio Luis Alberto López tiene la voluntad de viabilizar este proyecto, que demandará una inversión de Bs 1,8 millones.

Esta suma cubre la adquisición del equipo, las obras civiles y el tendido de un ducto de gas natural.

ENGAÑO

El crematorio es una demanda de larga data. En junio de 2014 —gestión del alcalde transitorio Remberto Gareca, de Alianza Solidaridad (AS)—, se lanzó una convocatoria a través del Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes), por un monto referencial de Bs 800.000.

¿Qué pasó con ese proceso de contratación? Eso es algo que aún no se sabe con certeza. Durante estos cinco años circuló la versión de que se adquirió el equipo, pero que éste no puedo ser instalado por las reducidas dimensiones de espacio donde debía ser instalado.

Hace un par de semanas, el exalcalde, en declaraciones al diario El Potosí, sostuvo que la licitación fue declarada desierta. En 2016, el entonces alcalde Williams Cervantes (MAS), anunció el inicio de una auditoría porque “hubo fallas en el proceso de calificación, la empresa no entregó el equipo y la infraestructura donde se debía colocar el horno es más pequeño que el equipo solicitado”. Hasta la fecha se desconocen sus resultados.

“Nos han tomado el pelo. Nunca ha llegado un horno crematorio al municipio (…) Llegó un contenedor, se decía que ahí estaba el horno. En ningún momento se declaró desierta la licitación”, sostuvo Relos.

El concejal aseguró que se abrió un proceso contra un funcionario, no contra la firma proveedora, porque supuestamente los ambientes no eran adecuados. “Pero nadie sabe si eran adecuados o no porque no llegó el horno, solo llegó un contenedor. Nos engañaron, nos mintieron”.

El funcionario sometido a proceso continúa trabajando en la municipalidad sin que se haya esclarecido nada. La licitación será publicada en los próximos días. Según el perfil del proyecto, el crematorio “será ecológico” —funcionaria con gas natural—, contará con dos chimeneas y tendrá capacidad para incinerar dos cuerpos a la vez.