Varias organizaciones políticas invitaron a Torres a formar parte de sus respectivos proyectos. La agrupación Movimiento Tercer Sistema (MTS) fue la primera en la anterior gestión, pero por el momento aun no definió si acompañará a esta sigla o se creará una alianza política más fuerte.
“Hace un tiempo he empezado a trabajar para cambiar la realidad de esta ciudad, que creo que no es la mejor. Pero también creo que Tarija puede tener días mejores y es porque siento que tiene potencial, por eso no me quedo tranquilo ni me acomodo a esta realidad.
Creo que podemos vivir mejor, pero debido a los políticos que hemos tenido en las ultimas dos décadas, que fueron una comparsa de mentirosos, negligentes, corruptos e incapaces, han llevado a este departamento y al municipio a una crisis social, ambiental y económica”, expresó.
Torres es un activista reconocido por expresar sin titubeos lo que piensa, fundador de uno de los primeros restaurantes vegetarianos en Tarija y por aplicar una forma de vivir diferente sin violencia hacia los animales ni hacia el medio ambiente, ganó muchos amigos (y algunos enemigos) en el camino.
Además, también fundó la SPAT y formó un equipo de jóvenes y adultos voluntarios que dedican su tiempo y su economía en rescatar a animales que se encuentran en situación de calle, para llevarlos a refugios o a espacios que los mismos voluntarios brindan hasta que se les consigue un hogar responsable.
Acompañó desde un primer momento a lucha por la defensa de la Reserva Nacional de Flora y Fauna de Tariquía, no como un extraño entre los comunarios sino como un miembro de la comunidad. Demandó al expresidente Evo Morales por la aprobación de los decretos que posibilitaban la exploración y explotación de hidrocarburos dentro de la Reserva y también interpuso otra demanda contra del actual alcalde, Rodrigo Paz, por la deforestación de árboles en la construcción de la avenida Costanera.
Torres indicó que los principales problemas del municipio están vinculados con la crisis ambiental, como es el caso de la contaminación del río Guadalquivir. Además de la escasez de agua, la erosión de los suelos, la falta de medicamentos y equipamiento en las postas y las obras sin concluir.
“El medio ambiente está terriblemente afectado. Podemos pasar por el río Guadalquivir, por la Planta de Tratamiento de Aguas, por el basurero municipal”, dijo.
La crítica a los actuales (y casi permanentes) políticos es directa. Torres devela actos de corrupción, proselitismo, nepotismo, fraudes y otras situaciones que debilitan la economía del departamento para beneficiar a círculos elitistas y tradicionalistas.