Según lo que consta en la comisaria en cuestión, el caso se registró minutos después del medio día cuando el denunciante y damnificado dejo en el escritorio de una oficina pública de calle Guemes su celular. En ese ínterin al volver por el mismo ya no estaba.
Por este motivo, y con ayuda de las autoridades del edificio, pudo saber que las cámaras de seguridad habían captado el momento del ilícito , como así también la identidad de los responsables.
Como consecuencia y con ayuda de la policía las parte fueron conducidas hasta la dependencia de calle Arenales, donde el caso quedo a consideración de la justicia.