
La embajada jujeña que fue parte de la
celebración estuvo compuesta, por un lado, por artesanos y productores
instalados en La Casa de todos los jujeños sobre avenida Santa Fe 967, y por
músicos, bailarines y cantores que brillaron en el escenario montado sobre
Carlos Pellegrini entre Avda. Santa Fe y Arenales.
El Chucupal endulzó a los visitantes con
sus exquisiteces; Reciclarte sorprendió con artesanías elaboradas con material
reciclable; Cerro de Siete Colores recibió la admiración por sus pesebres y
demás obras; Kunza mostró la innovación del arte pop andino; La Hurraca
presentó el trabajo artesanal en cuero de la provincia y Challa Huasi hizo lo
propio con el arte indígena trabajado en metal.
Mientras tanto, en el escenario mayor, las
voces de Coco Coronel Montes y Marcelo Ponce daban lugar a la fiesta jujeña,
que comenzó con el danzar del Ballet Flor de la Puna, continuó la energía joven
de Los Amarantitos, el canto de mujer sonó dulce y fuerte en la voz de Mariana
Barraza. La danza se hizo presente nuevamente, esta vez con el Ballet Mama
Pacha. Los jujeños de corazón bailaron al ritmo del coya y la llama junto a La
Cantada y el cierre fue a pura fiesta con Tomás Lipán.
Invitados especiales tales como el
periodista Julio Bazán y la Locutora Nacional María Ester Sánchez fueron agasajados
con platos andinos preparados por el cheff jujeño de talla internacional Daniel
Hansen.
Miles de jujeños y visitantes de todas
partes del mundo sintieron la energía viva de Jujuy, en producción, artesanías
y cultura artística.
La Representación Oficial del Gobierno de
Jujuy en Buenos Aires agradece infinitamente a productores, artesanos y
artistas por el compromiso asumido para con tan importante festejo, como así
también a quienes nos visitaron.