El jefe de Áreas Verdes y Medioambiente de la Alcaldía de Potosí, Justino Villanueva, informó que tienen que cumplir la norma que regula la aplicación de la roseta ambiental porque el plazo para acudir a la inspección ha concluido en diciembre de 2016.
El funcionario municipal añadió que ya se definió que en el curso de las siguientes horas se desarrollarán operativos en calles estratégicas del centro de la Villa Imperial y quienes no tengan ese distintivo no podrán entrar al centro patrimonial.
Se destacó que ese tema se socializó con los dirigentes del transporte público para que no existan reclamos posteriores porque se trata de un incumplimiento atribuible exclusivamente al propietario del vehículo puesto que dispusieron el tiempo necesario para que sometan los automóviles al control en los puntos establecidos.
En la Villa Imperial existen, cuando menos, 42 mil autos entre públicos, privados e institucionales. De ese total, siete mil, aproximadamente, se sometieron al control y cuentan, por tanto, con la roseta ambiental.
Un chofer, que no quiso idetificarse, preguntó si ahora puede someter a su automóvil al control, pero la respuesta fue que no, porque el plazo ha concluido en diciembre de 2016.
Desde la jefatura de Áreas Verdes y Medioambiente de la Alcaldía se hizo conocer que el nuevo registro comenzará en el mes de junio y esperan que el cien por ciento de los vehículos sean evaluados para que disminuya el nivel de contaminación.
En esta ciudad se reportó vehículos que tienen una elevada emisión de contaminación debido a su antigüedad pero también a la irresponsabilidad de los dueños que no hacen el respectivo mantenimiento.
Los vecinos piden mano dura
Los dirigentes vecinales piden que se aplique la norma ambiental que define el uso de la roseta ambiental que establece el retiro de placas para quienes no se somentan a los controles y carezcan de la roseta.
Desde la Federación Departamental de Juntas Vecinales (Fedjuve) se emitió la demanda de que los encargados del control no se limiten unicamente a evitar que quienes incumplieron el requisito ambiental ingresen al centro de la ciudad.
Los representantes de los vecinos se hacen eco de lo que dicen sus afiliados respecto a la contaminación que es elevada y se manifiesta con mucha fuerza en las calles de subida en la que los micros y civilianes dejan una estela de humo.
Los vecinos de la calle Linares detuvieron la contaminación con medidas de presión, lograron que se cambie el sentido de la vía siendo en la actualidad de bajada y por lo tanto mermó sustancialmente la emisión de anhídrido carbónico en esa parte de la ciudad. Esto podría ser imitado por otros vecinos cansados de la contaminación.